Tengo que confesar que el microblogging a través de twitter se ha convertido en parte permanente de mi vida virtual cotidiana. Después de haberme resistido durante un buen tiempo y de haberlo incluso rechazado, día a día descubro que se trata de un universo y una manera de comunicarse con muchas posibilidades y potencialidades interesantes. Tanto, que los apuntes han ido in crescendo porque se trata de una nueva forma de escritura, de una nueva forma de lectura y de una nueva forma de comunicarse, de estar en contacto con los otros, de conocer el mundo, de enterarse de lo que ocurre. Ver el buzón de gmail y actualizar twitter son dos acciones que se repiten permanentemente en mi interacción con la pantalla y el teclado (y a partir de hoy que logré sincronizar con gtalk más todavía).
Microblogging e identidades distribuidas
Aviso
Esta entrada corresponde al archivo histórico de Ciberescrituras (2005-2012).
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